¿Quieres cambiar de sofá? ¿Dónde termina ese escritorio que ya no cabe en tu nuevo hogar? El alquiler de muebles ya es una realidad que ha llegado para quedarse. Los nuevos estilos de vida, los espacios de trabajo innovadores y el cuidado del medio ambiente constituyen tres de los factores que determinan el éxito de esta tendencia.
El informe Economía Circular en el Sector del Mueble afirma que cada año se colocan en el mercado europeo diez millones de toneladas de muebles y que, aproximadamente, se desecha la misma cantidad. Entre el 80 % y el 90 % de los muebles terminan su vida en los vertederos municipales o en incineradoras. Estos desperdicios dificultan la transición hacia una economía circular e impiden alcanzar las cero emisiones netas de carbono.
Por ello, el alquiler de muebles se presenta como una solución para el sector. Además, según datos del mismo estudio, la restauración de muebles generaría 157.000 nuevos puestos de trabajo y ahorraría seis millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2).
¿En qué consiste el alquiler de muebles?
El alquiler de muebles funciona como una suscripción. Empresas especializadas como John Lewis o IKEA han lanzado sus propios servicios de arrendamiento, en los que el usuario escoge un mueble o una selección de artículos y los utiliza durante los meses que se acuerde en el contrato. Al finalizar este período, el arrendatario decide si quiere comprarlos definitivamente o devolverlos. En este último caso, la marca los reacondiciona para darles una nueva vida.
Una de las razones principales del auge de estos negocios radica en la forma de vida de la generación millennial. Para este grupo social el alquiler ya no significa una pérdida de dinero. Además, son afines al pragmatismo, ya que prefieren vivir el momento y perseguir nuevas oportunidades. El Economista ofrece los siguientes datos: “El porcentaje de personas de entre 30 y 40 años que viven de alquiler es del 34 % y se espera que, dentro de cuatro años, en 2025, esta ratio llegue al 40,33 %”. Otro factor que influye en esta tendencia es que las personas jóvenes no pueden acceder a la compra de una vivienda por ser incapaces de hacer frente al pago de la entrada ni poder optar a una hipoteca.
Las ventajas del alquiler de muebles
La sostenibilidad, la rentabilidad y la flexibilidad constituyen las principales ventajas del alquiler de muebles. La fabricación de los llamados muebles rápidos requiere del empleo de una gran cantidad de recursos (energía, agua, mano de obra…), a pesar de lo cual se desechan después de un breve período de tiempo. Por el contrario, la reutilización y reparación de los artículos permite realizar un uso más sostenible de los recursos y fomentar la economía circular. En esta línea, Ikea se ha comprometido a reducir su huella de carbono y convertirse en un negocio circular para 2030.
En cuanto a la rentabilidad, por un lado, resulta beneficioso para la persona usuaria porque el alquiler es más económico que una compra. Por otro lado, también supone una ventaja para la empresa porque puede reutilizar materiales y reparar mercancía para volver a ponerla en el mercado.
La flexibilidad es otra de las claves del éxito del alquiler de muebles, ya que ofrece más libertad a la hora de elegir los artículos que se desea tener en el hogar en cada momento. Esta modalidad se adapta a las necesidades de suscriptores casi en tiempo real; permite actualizar el mobiliario y las estancias sin necesidad de comprometerse a largo plazo.
En último término, podría parecer que no beneficia a las marcas de diseño de interiores más exclusivas, pero este sistema permite que más personas puedan disfrutar de muebles de diseño por menos dinero y acceder siempre a nuevos estilos y tendencias.
Un buen ejemplo que reúne estas tres ventajas es la filosofía de la marca Harth: “Queremos brindarles a cada cliente el acceso a muebles de alta calidad a precios asequibles, mantener un diseño bien hecho en circulación y fuera del vertedero. Queremos ayudar a las personas a reducir costos, desperdicios y su huella de carbono, al tiempo que mantienen sus hogares y negocios inspiradores, a la moda y significativos”.
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El modelo Work As a Service: los nuevos espacios de trabajo
El coronavirus fue un punto de inflexión en la consolidación del éxito del alquiler de muebles. Con él llegó el incremento del teletrabajo y la necesidad de adaptar espacios de nuestros hogares como oficinas improvisadas. En este artículo de Connections by Finsa Los nuevos nómadas: trabajar donde y como quieras, puedes conocer más acerca de lo que supuso este cambio en el mundo laboral. Y, desde hace ya tiempo, venimos hablando de la oficina líquida y de los nuevos espacios de trabajo flexibles como el coworking, un lugar que también se beneficia de la tendencia del alquiler de muebles.
La marca finlandesa Martela ofrece un servicio completo de alquiler de muebles, tanto para las oficinas como para la plantilla que trabaja en remoto en su casa. En su página web presenta el WaaS (Workplace as a Service): “El modelo WaaS permite a la organización pagar una tarifa mensual solo por lo que realmente necesita, lo que significa que los problemas relacionados con la posesión de muebles no existen. De esta forma, el lugar de trabajo siempre cumplirá con los requisitos y objetivos actuales”.
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Las residencias, los trabajos, los gustos y las necesidades son elementos cambiantes a lo largo de la vida de las personas. Por ello, tendencias como el alquiler de muebles van ganando terreno y pronto podrían convertirse en la corriente mayoritaria.
Y tú, ¿te unes a la tendencia del alquiler de muebles? ¿En qué proyectos lo ves como algo útil? Cuéntanoslo en redes sociales a través del hashtag #ConnectionsByFinsa.
