Así serán las cocinas del futuro

La tendencia apunta a que dentro de 20 años la mayor parte de las comidas que hagamos en nuestro día a día nos las servirán a domicilio. Por eso, poco a poco, se ha comenzado a repensar el papel de la cocina que tendrá en nuestras casas. Y los profesionales del sector apuntan a que irá ganando peso como lugar de encuentro y se irá integrando paulatinamente en estancias principales de nuestro hogar.

“Creemos que las cocinas del futuro van a ser uno de los puntos centrales de la vivienda, de hecho, ya lo están siendo”, comenta Maria Bermúdez, del estudio de interiorismo Quefalamaria situado en Vitoria-gasteiz.

“Estamos abriéndola al resto de la casa al unirla con el salón y comedor, y cada vez valoramos más nuevos acabados, antihuella, autoreparadores, encimeras duraderas y atemporales. Será un lugar que invita a ser vivido y disfrutado, ya cocines más o menos. Se concibe este espacio como punto de encuentro, de disfrute de familia y amigos…”, recalca.

“En cuanto a los materiales el coronavirus va a jugar un papel fundamental. Hasta ahora se desarrollarán materiales que funcionaban muy bien como bactericidas, pero no tenemos nada específico para los virus y se está investigando en esa dirección. La facilidad de limpieza va a ser un factor a tener en cuenta después de esta crisis”, apunta Sonia Fernández, del departamento de diseño de Finsa.

Elementos multifuncionales en la cocina

Evidentemente, la tecnología jugará un rol determinante en las cocinas de las próximas décadas. Hace cuatro años Ikea encargó a IDEO que imaginase la cocina del futuro y cuya implantación en el mercado fecharon en 2025.

La firma especializada en diseño formó un grupo multidisciplinar con alumnos de las universidades de Lund y Eindhoven para que le ayudase con la tarea. Se trataba de buscar no solo los avances tecnológicos, sino de identificar también los cambios sociales y de comportamiento que se producirían a medio plazo. El sorprendente resultado se expuso en el Salone Del Mobile en Milán y en EXPO Milano.

La estrella de aquel piloto era una encimera que identificaba los alimentos y sus características principales como el peso o su valor nutricional cuando se colocaban sobre ella. Una de las nociones principales con la que trabajó este grupo de investigación es la creciente demanda de información de las personas en relación a los productos que consume.

Esa no era la única misión de la encimera, también se transformaba en una cocina de inducción cuando identificaba que habían colocado una sartén sobre ella. La tendencia es la de tener menos elementos y que sean más multifuncionales.

 

Conservación de alimentos y sostenibilidad

“Pensando también en la sostenibilidad, destinaremos un parte importante de la cocina a crear un sistema de reciclado práctico, segmentado, así como se impondrán los electrodomésticos con alta eficiencia energética”, dice Maria Bermúdez. “Y se seguirá evolucionando en mejores sistemas de dosificación de agua y en materiales que se produzcan de forma sostenible o que procedan de elementos reciclados”, incide Sonia Fernández.

Ese es precisamente otro de los cambios sociales que identificó IDEO para el piloto de Ikea: cada vez somos más conscientes de la importancia de cuidar el planeta. En la Concept Kitchen 2025 se hace hincapié en la cantidad de alimentos que se desperdician porque se pierde la noción de que los tienes almacenados y no eres consciente de su fecha de caducidad.

Y proponen como solución muebles más abiertos y con envases transparentes y que sean capaces de generar ambientes de conservación adaptados para cada producto. La nevera convencional como la conocemos hoy parece que tiene los días contados.

Concept Kitchen 2025 | IKEA

Cocinas con inteligencia artificial

En conseguir que generemos menos residuos y podamos aprovechar mejor los alimentos que compramos tendrá mucho que ver la inteligencia artificial, que conocerá mejor que nosotros nuestros hábitos de consumo y gustos. “Ya estamos viendo –explica Sonia Fernández- neveras que te avisan de que se está acabando la leche o de que te faltan ciertos ingredientes para el plato que sabe que cocinas habitualmente un día determinado de la semana”.

La inteligencia artificial debutó este año como plato estrella de Madrid Fusión. Una empresa española I+DEA Siro Foods, en colaboración con IBM, presentó una herramienta que permite gracias a esta tecnología conocer los gustos de los comensales de cualquier restaurante del mundo, con lo que esto ayudaría a servirles platos que encajasen con esas preferencias.

La aplicación generó controversia entre algunos de los chef de alta cocina. “Los grandes restaurantes del mundo son los que no siguen la tendencia marcada a los gustos de la gente y la alta cocina debe estar vinculada al talento personal de la gente que lleva los restaurantes. Esta herramienta nunca podría estar dentro de la alta cocina”, defendió Dabid Muñoz, del restaurante DiverXo. Advirtiendo del peligro de que la tecnología acabe encasillándonos en un solo tipo de alimento y experiencias.