¿Cómo puede la arquitectura superar el modelo de externalización y contribuir a descarbonizar el país mediante el uso de materiales locales? Esta pregunta abre Internalities, la propuesta del Pabellón de España en la 19ª Bienal de Arquitectura de Venecia, que se celebra del 10 de mayo al 23 de noviembre de 2025.
En esta edición, la Bienal se presenta como un espacio de reflexión sobre el papel de la arquitectura en un mundo en transformación. Bajo el lema Intelligens. Natural. Artificial. Collective, el comisario Carlo Ratti invita a explorar cómo la inteligencia natural, artificial y colectiva puede redefinir nuestro entorno construido. Para Carlo Ratti, la palabra Intelligens sirve de laboratorio dinámico y reúne a voces expertas en las diversas formas de inteligencia. Por ello, por primera vez, la exposición cuenta con más de 750 participantes entre profesionales de la arquitectura e ingeniería, climatología, filosofía, artes, cocina, programación, escritura, talla, agricultura o diseño. El grueso abarca varias generaciones, desde carreras consolidadas con Premios Pritzker o Nobel a personas neófitas.
En esta edición participan 66 países, distribuidos en los diferentes Pabellones de los Giardini (26), en el Arsenale (25) y en el centro histórico de Venecia (15). Además, este año se suman cuatro países a la Bienal: República de Azerbaiyán, Sultanato de Omán, Qatar y Togo.

Internalities como alternativa de equilibrio: el Pabellón de España en la Bienal de Arquitectura de Venecia 2025
“La construcción genera externalidades cuando extraemos materiales, quemamos energías, desplazamos oficios locales, producimos residuos y generamos emisiones. Las externalidades ocasionan, así, un grave desequilibrio entre los edificios que construimos y los territorios que afectamos”, aseguran Roi Salgueiro y Manuel Bouzas, los comisarios de Internalities: Architectures for Territorial Equilibrium, la propuesta del del Pabellón de España en la Bienal de Venecia 2025. Combinadas, estas externalidades constituyen la causa central de la crisis medioambiental que Carlo Ratti pretende abordar en esta bienal.
La exposición reúne 16 proyectos seleccionados entre 171 propuestas, que reflejan el esfuerzo de una nueva generación que persigue equiparar ecologías y economías mediante el uso de recursos locales y regenerativos, con un papel destacado para la madera procedente de montes vecinales en mancomún de Galicia, gracias al patrocinio de Finsa.

El proyecto se articula en torno a cinco ejes de investigación, con soporte argumental y de fotografías documentales:
- Materiales: Se promueve el uso de materiales locales, naturales y renovables, como la madera, la tierra o las fibras vegetales, que no solo reducen la huella ambiental, sino que también reactivan economías territoriales.
- Energía: Se valoran estrategias que incorporan eficiencia energética, autoconsumo y recuperación energética, fomentando una transición energética descentralizada y sostenible.
- Oficios: Se pone en valor el conocimiento intergeneracional y los saberes tradicionales vinculados a la construcción, destacando su capacidad para generar empleo y fortalecer la identidad cultural.
- Residuos: Se impulsa una lógica circular en la arquitectura, promoviendo la reutilización de materiales, técnicas de desmontaje y la incorporación de residuos como materia prima.
- Emisiones: Se analiza el impacto ambiental de todo el ciclo de vida del edificio, desde la extracción de materiales hasta su desmantelamiento, con el objetivo de reducir las emisiones asociadas.
La exposición muestra la unión de instituciones en favor de modelos arquitectónicos más sostenibles: está promovida por el Gobierno de España, a través de la Secretaría General de Agenda Urbana, Vivienda y Arquitectura del Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana (MIVAU), en colaboración con Acción Cultural Española (AC/E) y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID).

